En respuesta a la difícil situación vivida en Bahía Blanca tras las severas inundaciones, Woopy y toda su comunidad de seguidores llevaron adelante una emocionante campaña solidaria que mostró el enorme poder de la colaboración y la empatía.
La acción comenzó con una convocatoria realizada a través de Instagram, invitando a quienes quisieran colaborar a acercar alimentos no perecederos y productos de limpieza a los cinco locales que Woopy tiene en funcionamiento. Esta primera etapa, que se llevó a cabo durante un solo día, fue todo un éxito: se lograron reunir varias cajas con donaciones que fueron entregadas a la Fundación Sí, institución comprometida con la ayuda directa en este tipo de emergencias.
Pero lo más poderoso de esta historia fue lo que ocurrió después: la comunidad pidió más. Muchos seguidores que no pudieron participar en la primera jornada escribieron para saber si habría otra oportunidad de colaborar. También llegaron mensajes de personas ofreciendo ayuda adicional, lo cual motivó a Woopy a organizar una segunda etapa de la colecta, esta vez extendida durante tres días consecutivos.
Durante esos días, los locales de Woopy se transformaron nuevamente en centros de acopio, incluso siendo compartidos en grupos de WhatsApp como puntos recomendados para donar. Además de alimentos y artículos de limpieza, comenzaron a recibirse productos escolares, en respuesta al pedido de algunas escuelas afectadas y de la propia Fundación Sí. Como parte de esta nueva etapa, la marca Gupi se sumó con donaciones de útiles escolares, fundamentales para que los niños pudieran retomar sus actividades escolares.
Esta acción solidaria demuestra cómo una comunidad movilizada puede marcar una gran diferencia. Woopy y sus seguidores actuaron juntos, con compromiso y corazón, para estar al lado de quienes más lo necesitan, consolidando así un vínculo que va mucho más allá de lo comercial: el de una verdadera comunidad con propósito.